53. ADICCIONES: SOBRIEDAD EMOCIONAL
20 de mayo, 2012
en Blog
HUMILDAD VERSUS EGO.
Plantear, sin ocultar nada, la propia realidad ante otro ser humano y ante la propia conciencia, asienta las bases de un proceso de desiflamiento del ego, nunca antes planteado en la vida de la persona adicta.
Ha habido que vencer muchos miedos e inseguridades para hacerlo, pero ha servido, sobre todo, para interiorizar, que un cimiento de HUMILDAD es posible en la reconstrucción de una vida deshecha.
La inseguridad da paso a una fortaleza humilde. El «YO» de raíces mustias ha tocado fondo, ante el gesto establecido conscientemente, de compartir las miserias vitales como argumento de recuperación y humildad.
Tanto así, que ante la batería de defectos de carácter, de los que se tiene que hacer cargo, la persona adicta, se ve insignificante y requiere de nuevo la ayuda de quien pueda ayudarle. Tendrá que utilizar de nuevo a la persona en quien confió y a su propia conciencia.
El constante desinflamiento del ego al que está siendo sometido, necesita otra vuelta de tuerca. La liberación de la tensión y de la ansiedad, será la recompensa. Bien merece la pena.
Para quien no ha conocido la paz, ni el sosiego, es más que apetecible. ¿Estará dispuesto/a a este nuevo reto?
Un reto que asienta y libera de los viejos hábitos de pensamiento. La higiene mental y la ventilación emocional alcanzan su punto culminante.
Los objetivos son:
1. Llegar a ser honestos/as y humildes, sin reservas.
2. Ser plenamente conscientes de los propios defectos de carácter y querer librarse de ellos, sin reservas.
3. Generosidad y salud mental.
4. Valor.
5. Conocimiento pleno y admisión plena de la enfermedad, sin victimismos.
7. Comprensión, ánimo y sobriedad.